Hace frío, y ya no siento nada… así que hazme el favor de venir, sacarme de la oficina, y llevarme de tu mano lejos, MUY LEJOS. Llévame a comer a uno de esos restaurantes italiano famosos y pide pasta para comer. Se amable, y retírate la silla para sentarme, y una vez hecho a la luz de las velas, coge mis manos y acaricia el dorso de ella. Mírame a los ojos y dime lo bonita que estoy hoy, para si esbozar una leve pero gran sonrisa, entonces, dibuja un corazón en mi mano con la yema de tus dedos y dime que me amas.
¿Sientes como ese escalofrío recorre mi cuerpo? ¿Cómo se ha estremecido? Sonríe. Eres lo más bonito del mundo.
Alzo mi cuerpo por encima de la mesa, hasta robarte un beso de otros muchos tantos que quiero darte. Entonces, invítame, aunque te rechiste y te diga que no, o me niegue rotundamente. Después, te pegaré flojito en el hombro y besaré tus dulces labios y al finalizar te diré, que eres la persona más boba del mundo. Entonces, cogeré tu mano y como una niña pequeña, tiraré de ella corriendo y te haré burlas. ¡Venga tortuguita! Hasta llegar a un hotel. Tapo tus ojos con una benda hasta llegar a la habitación. Te la quito abriendo la puerta, y desde la entrada de la habitación, millones de pétalos y rosas inundaran tus pies. La luz de las velas servirá de guía, como una especie de camino hacia la cama, donde trillones y trillones de pétalos de rosa forman un gran corazon, acompañados de las letras T, E, A, M y O… y entonces me miras, nuestras miradas se funden con la luz ténue que crean las velas aromáticas, las cuales desprenden un olor dulce y romántico. Lentamente nos vamos acercando, hasta que rozamos nuestros desesperados labios, pellizcando nuestras comisuras, comenzando a besarnos lento, muy lentamente… hasta fundir nuestros besos y desatar todo nuestro desenfreno de amor. Siento como nuestros cuerpos se funde, formando uno. Tu pelo, tu suave y dulce cuello, tus manos, tu piel… Recorro cada cm de tu piel, dando suaves y húmedos besos sobre ella. Me miras. Sonríes. Susurro un Te amo. Respiras fuerte, agitado. Y caemos en la cama, como si de una guerra se hubiese tratado. Recuperamos el aliento y nuestros labios se vuelven a juntar, nuestros ojos se van apagando como las velas ya lo han hecho.. dejando su aromático olor, y tus besos su magnífico sabor.
Dios que entrada más linda :) Es super romántica y muy sutil, me encantó :). Me gusta saber que las personas se sienten identificadas con lo que escribo c: un beso!
ReplyDelete